sábado, 7 de agosto de 2010

Mis niños se hacen grandes


Estoy muy orgullosa de Marco y Sebastián, son ya unos empresarios. Con su primer empleo aprenderán muchas cosas prácticas que les servirán para toda la vida.
Lo que yo aprendí en mi primer empleo fue a obedecer y hacer algunas cosas que no me gustaban. Hacerlas bien y terminarlas y al fin de la quincena, disfrutar el fruto de mi trabajo con mis papás y sí alcanzaba con mis hermanos. Saber administrar el dinero que me tenía que alcanzar por 15 días más. Economizar en mis gastos y disfrutar el día de descanso como un regalo precioso.
Y mucho tiempo después aprendí que el dinero es sólo un medio para aprender y que el verdadero valor de las cosas no está en lo que cuestan, sino en lo que valen.
Todo esto ha servido hasta el día de hoy. El dinero ya me lo gasté, compré cosas lindas para mi familia: Recuerdos que me hicieron crecer y madurar.
Después de todo, y el principio de todo es que, "de Jehová es la tierra y su plenitud; el mundo, y los que en él habitamos". Salmo 24:1
Todo es aprendizaje; valoren lo que están viviendo y que Dios los bendiga mucho.
Los amo

2 comentarios:

Norma dijo...

te amo. ali

Norma dijo...

jaajaa... solo les faltan clientes! :)